Mi vida para mí.

Ya pasé la etapa de los blogs públicos, llevo como treinta.Sin embargo jamás hice mi propio blog, uno que hable un poco de mí, de mi historia, mis amores y desamores, mis viajes, mis poemas, mis relatos, mis amigos, las cosas que me gustan.Por eso quiero inaugurar esta especie de Diario íntimo-aunque tal vez no tanto-. Simplemente para escribir lo que sienta, lo que quiero, lo que me sale, lo que Soy. "Escribir para mí y por mí". Bienvenido a mi PC blog amigo, aquí charlaremos juntos de tanto en tanto-ya que soy furtiva e inconstante-.

12.8.09

Mi primer amor se llamaba Pino. Cont y final.



Esa noche de carnaval, en el baile del Club Sarmiento, lo conocí. Me impactó su manera de vestir, muy a la moda de aquellos tiempos. Pantalón oxford blancos y una camisa floreada en blanco y rosa. Tenía el corte de pelo que se estilaba, una melena medio "sauvage" y sabía bailar todos los ritmos que ponían. Fumaba mucho, seducía, era histriónico y muy canchero. Sin embargo, lo que más me gustaba de él era la manera de mirar entrecerrando los ojos, haciendose el misterioso. Y su boca sensual. Me sacó a bailar y lo hicimos durante toda la noche.Yo me había puesto un collar larguísimo con noventa perlas-falsas más vale-, que me había regalado otro chico. Pino me lo sacó, se lo colgó y anduvo amenazandome todo el tiempo con que se lo quería quedar. Yo no quería pero con tal de volver a verlo le seguí el juego. Y así empezó la relación, vivía a unas siete cuadras de mi casa y todas las tardes, a eso de las 5, me llamaba para ir a caminar y "chapar" un poquito. La cuestión era que él tenía mucha experiencia y en mi caso, era la primera. Se la pasó un mes seguido haciendome el verso de que le quedaban solo cuatro meses de vida por problemas con el pucho y con eso intentaba manipularme para conseguir "algo más". ¡ Qué antiguo hablar de *prueba de amor*...!. Y yo era tan ingenua, que no solo me lo creía-que se iba a morir-, sino que me sentía culpable. Siempre digo que tengo centenas de ángeles que me custodian. En este caso no era tan tremendo, pero con el pasar de los años, me salvaron de caer en momentos realmente jodidos. Y si caía, siempre salía bastante bien. Tendría un ángel especial protegiendo mi fantasía y mi ingenuidad. (Ya no la tengo)...a la ingenuidad.

Pero como era de esperar, este taurino nacido un 29 de abril se hartó y decidió borrarse. Eso sí, no me devolvió el collar. Yo me había enamorado por supuesto y el collar era la excusa para llamarlo todos los días y escuchar a su mamá en el teléfono, respondiendo hasta con cariño diría_ No amorosa, Pino no está, le digo que te llame.

Pasaron los días y pasaba yo por la puerta de su casa para ver si lo enganchaba.Nada. Hasta que me calenté y me fui decidida y toqué el timbre. Su mamá me atendió y le dije que solo venía a buscar mi collar de "perlas". _ Ah si...,yo te lo traigo porque mi hijo no está.

Me fui caminando contando veinte veces las 90 perlas, me recompuse y al Sábado siguiente me empilché y me fui a bailar a Saint George. Para mi sorpresa, apenas subí la escalera, Pino bailaba bien "vivo" con una flaca llena de rulos. A mí me conocían porque ya conté que allí iba a bailar y conocía al DJ. Me acerqué, me miró y siguió desplegando sus atributos en la pista.Entonces grité _Este tipo se la come.¡¡¡, maricón.¡¡¡¡. Muchos se dieron vuelta, otros se rieron y yo quedé como una loca pero me saqué la bronca. Por supuesto nunca se murió, al menos durante varios años más.
PD. La foto es de Cristian Andrade, el que bailaba en Música en Libertad y al que se parecía tanto.

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