Mi vida para mí.

Ya pasé la etapa de los blogs públicos, llevo como treinta.Sin embargo jamás hice mi propio blog, uno que hable un poco de mí, de mi historia, mis amores y desamores, mis viajes, mis poemas, mis relatos, mis amigos, las cosas que me gustan.Por eso quiero inaugurar esta especie de Diario íntimo-aunque tal vez no tanto-. Simplemente para escribir lo que sienta, lo que quiero, lo que me sale, lo que Soy. "Escribir para mí y por mí". Bienvenido a mi PC blog amigo, aquí charlaremos juntos de tanto en tanto-ya que soy furtiva e inconstante-.

1.8.09

Guerrillera en Hamburgo




Nunca me vi rasgos de alemana, sin embargo, cuando estuve por allá, descubrí que la mayoría de los alemanes son rubios solo cuando son chicos y después se vuelven castaños. Las mujeres adolescentes, se pintan el pelo de cualquier color, las adultas se tiñen de rubio platinado para seguir viéndose como alemanas. Volvía de Ámsterdam en un vuelo de la KLM...Estaba vestida sobriamente porque me habían conseguido un pasaje en la clase empresarial. Pantalón y bleizer negros y una flor de seda beige en la solapa.Mi pelo prolijo con largos rulos que hoy añoro y como buena latina, maquillaje y aritos infaltables. En el momento del desembarque y frente a aduana, me sentí bastante formal junto a tanta gente exuberante y de apariencia atípica.Tenía delante y detrás de mi, rastafaris y miembros de la secta Amish con sus típicos atuendos y barbas. Otros llevaban tatuajes y piercings. Sin embargo, por alguna razón , la mujer policía me miró y me hizo esperar mientras el resto iba avanzando sin más.Lamentablemente mi ingles era muy bueno pero mi alemán nulo, nada peor no entender qué murmuraba la mujer con otros uniformados. Los demás seguían adelantándose y yo allí, demorada y perpleja. Llegaron unos hombres-policías tal vez- y empezaron a pedirme papeles y documentos.Sus maneras eran autoritarias, así lo sentía. Cuando toda la cola de pasajeros ya estaba libre, me sentí frente a una indagatoria digna de dictadura militar.Nombre, nacionalidad, de dónde venía, qué estaba haciendo en Holanda, a qué venía a Hamburgo, para qué, por cuanto, dónde paraba, cuando regresaba a mi país y algunas otras cosas más. Y al final me calenté. Parecía un juicio y yo tenía poco que declarar.Venía de visitar a mis amigos holandeses, tenía pasaje de vuelta a Argentina en la mano, iba a Hamburgo porque allí estaba mi pareja que era alemán y terminé gritando en perfecto ingles que no tenía ninguna intención de quedarme a vivir en ese país a la par que les tiraba en la cara el pasaje de regreso en Lufthanza para 20 días después.También les grité que podían llamar por los altavoces a quienes me estaban esperando, las hijas de mi pareja MUY pero MUY alemanas y rubias.Sin embargo, algo me decía que no era cuestión de discriminación, se me estaba dando demasiada importancia. Revisaron todos mis papeles una y otra vez, hablaron entre ellos, me miraron de arriba a abajo y al final, apareció un alemán muy educado que pidiéndome mil disculpas me hizo pasar. Recién me enteré de los por qués cuando me encontré con Tanja y Marcelo. _ Lo imaginaba-dijo Tanja-, se lo comenté a Marcelo de antemano.Se escapó una guerrillera alemana muy parecida a vos que para peor, se llama Mónica.Y la están buscando en los vuelos_ Nunca me vi. rasgos de alemana.Sin embargo, parece que las guerrilleras no tienen rasgos definidos.

1 comentario:

  1. Piba, la que no tiene rasgos definidos, es la estupidez...

    Me alegra que te hayas decidido a hacer éste blog. Es bueno y es sano poder contar nuestra historia, al tiempo que la vamos reviviendo.
    Habrá mucho recuerdo, pero también habrá replanteos... que no son arrepentimientos y que no son malos, todo lo contrario.

    Un beso y piú avanti...
    Marcelo

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